Josep Baijet. CEO and Founder en uRock

Como CEO de la compañía, me enfrento al reto diario de tener una visión estratégica global, al mismo tiempo que debo tomar decisiones para solventar las necesidades del día a día, y todo esto, sin perder de vista los objetivos de la empresa.

No es tarea fácil, pero durante el largo camino, he llegado a la conclusión de que todo esto no sería posible sin mi equipo, un equipo feliz. Sin duda alguna, uno de mis mayores referentes como compañía es Southwest Airlines, donde los empleados y las empleadas son lo primero. Sí, has leído bien: la aerolínea pone la felicidad de los empleados por encima de la satisfacción del cliente. El enfoque puede parecer muy convencional, pero en su historia de éxito, crecimiento de valor y resistencia a las crisis en una de las industrias más competitivas y duras, podemos ver que realmente funciona, y es que la ecuación (desde mi parecer) es bien sencilla: Empleado o empleada feliz = cliente o clienta satisfecho/a.

Los principios de la Aerolínea se basan en que un empleado o una empleada alineado/a con los objetivos de la marca, tiene una mejor respuesta operativa y aporta una experiencia de servicio al cliente o clienta superior. Lo resumen con 3 principios:

1. Compartir objetivos
2. Compartir conocimiento
3. Respeto a las personas

Para conseguirlo siguen las siguientes pautas:

1. Diversión: el equipo de comunicación interna de la compañía se encarga de organizar fiestas para sus empleados y empleadas (Halloween, cena de Navidad…), de felicitarles por su cumpleaños, Santos, etc. En definitiva, cuidan a las personas, tratan de que se diviertan y les hacen sentir especiales.
2. Intención de mejora constante: la aerolínea realiza de manera recurrente encuestas, tanto a las personas que trabajan en ella como a consumidores, para así poder aprender día a día. En ambas encuestas aplican el mismo criterio de evaluación.
3. Formación: las personas que trabajan en la compañía tienen la oportunidad de formarse de manera interna para así poder aportar un valor añadido a la compañía.
4. Reconocimiento interno: se valora el trabajo y el esfuerzo de las personas que trabajan en la aerolínea, nombrando «al trabajador o a la trabajadora del trimestre», elegido/a por sus propios compañeros y compañeras.
5. Altruismo: los empleados y empleadas tienen la oportunidad de dedicar ciertas horas de trabajo a obras sociales.
6. Coherencia: para poder llevar a cabo todas las acciones anteriores, las personas que trabajan en la organización deben tener mucho sentido del humor, ser atentos/as y sobre todo compartir los valores de la compañía.

Por si te cuesta imaginarlo, en el siguiente video se muestra una representación del espíritu de la compañía:

Divertido, ¿verdad? Conseguir un buen ambiente de trabajo, con un equipo feliz es clave para potenciar un alto rendimiento.